Ruta preparada con mucha antelación para subir al Curavacas, en busca de una mariposa, pero las previsiones de lluvia y tormenta, nos hicieron tomar la decisión de posponerla. Teníamos pensado hacer algún paso comprometido y es mejor no arriesgar. A las 8:oo de la mañana en el Roble de Cervera, Luis Herrero (Naturaleza de la Valdavía) y yo, decidimos acercarnos a Rebanal de las Llantas a buscar las cuevas Teresa y del Agua, de las que ya habíamos hablado en alguna ocasión.
Antes de salir hacia Rebanal, descargamos un track de El Balcón de Judas, sin el cual nos hubiera sido imposible encontrar las cuevas. ¡Gracias, Balcón!. Como curiosidad, la Cueva Teresa está marcada en el topográfico nº 106-4 del IGN, pero a 750 m de donde se encuentra realmente.
Salimos de Rebanal pasadas las 8:30. En vez de seguir el track, decidimos hacerlo un poco a nuestra manera. Mucho agua en la vegetación al principio, pero enseguida nos metimos en un hayedo de cuento. Cogimos nivel siguiendo el curso del Arroyo de Cueva Teresa, y luego nos acercamos a la zona donde estaba marcada. Muchos cortados de caliza, y algo enriscados en algún momento buscando la cueva que no acababa de aparecer. Una llamada a Vidal, el Esgallero, que nos dió alguna indicación y subiendo un poco más. vimos un par de oquedades por las que se puede acceder a la terraza donde se encuentra la Cueva Teresa. Visitamos esta y otra que hay al lado a las 11:00.
Luego fuimos a buscar la Cueva del Agua, que encontramos sin demasiada dificultad, por las indicaciones dadas. Están bajo unas manchas de excremento de buitre en la pared caliza, al pie del cantil.
Esta cueva es la que más merece la pena, y nos entretuvimos un buen rato en ella, hasta cerca de las 13:00 horas. Mana agua de la cueva y es una delicia, sobre todo en un día de calor.
Por no regresar por el mismo valle por donde subimos, decidimos buscar un paso en el cantil, y nos tocó echar las manos y hacer alguna trepada sencilla para llegar a la parte superior.
De allí, justo debajo de la Peña Miranda, tiramos hacia ella buscando la pista del Alto de la Varga. Una vez llegados a ella, paramos a almorzar y bajamos de nuevo a Rebanal siguiendo la pista.
Llegamos a las 16:30, y dimos por finaliza la jornada.
Vimos mariposas, setas, murciélagos, polillas, pájaros… Un día muy aprovechado, con la excelente compañía de Luis, el maestro.
Hay que ir pensando en otras, y poner fecha al Curavacas.
Dos aclaraciones:
1.- Los nombres de los bichos, están puestos a mi parecer, no ofrecen ninguna garantía, ;-).
2.- No aconsejo a nadie seguir el track. Hay tramos verticales en los que buscábamos la cueva, y la subida después de visitar la Cueva del Agua NO ES SENDERISMO.
Datos de la Ruta:
- Zona: La Peña
- Tipo de Ruta: Circular
- Dificultad: Media, alguna trepada
- Distancia: 12.64
- Tiempo: 7:50 h
- Altitud mínima: 1123 m
- Altitud máxima: 1708 m
- Ascensión acumulada: 755 m
- Descarga datos GPS
Cruzando el puente sobre el Arroyo Rebanal Arroyo de la Cueva Teresa por el hayedo Vimos varias especies de setas Subiendo por el hayedo Nido en el suelo. Se llega a apreciar un huevo Buitrera, con tres elementos a la puerta. Buitre leonado (Gyps fulvus)
Acceso para llegar a la Cueva TeresaUno de los pasos para acceder a la Cueva Teresa Exterior de la cueva pequeña. Creo que Balcón la llama Teresina Polilla en el interior de la cueva. Por identificar Entrada de la Cueva Teresa Murciélago de herradura (Rhinolophus sp) Ortiga común (Anthophila fabriciana) Mancha leonada (Coenonympha arcania) Maculada (Pararge aegeria) Bajando por el hayedo buscando la Cueva del Agua Entrada de la Cueva del Agua Blanquita de la col (Pieris rapae) Interior de la Cueva del Agua Mirador sobre el Valle Estrecho Investigando la cueva Mucho que fotografiar Se puede entrar algo más, pero hay bastante agua en el suelo Otra de las cavidades Un Opilión en la cueva: Gyas titanus Marcando contraluz La salida desde el interior Otra de la salida Dos volantones de Avión roquero (Ptyonoprogne rupestris), en la cueva Subiendo el risco hacia Peña Miranda Las nubes espectaculares Luis y el Santa Lucía detrás Castaño morena (Coenonympha glycerion) El omnipresente Curavacas Ortiguera (Aglais urticae) Vista hacia el Espigüete Panorámica del móvil Montañesa cantábrica (Erebia palarica) Lunares de plata (Argynnis aglaja) Doncella mayor (Melitaea phoebe) Reunión de Doncella mayor (Melitaea phoebe) y Fabiola (Polyommatus escheri) Iglesia de Rebanal de la Llantas
Buena ruta para visitar las dos cavidades poco conocidas de la zona, fue un placer . Un saludo
Muy buena Pareja!!! buen legado nos dejó el tristemente desaparecido Teodoro Bustamante con el descubrimiento de esta joya del valle Estrecho!!! un placer haber podido colaborar, aunque la verdad que no fue mucha la indicación, je, je, je, en este guapo reportaje!!! A ver cuando saco un hueco para descubrir este mágico paraje!!! un abrazo Montripero!!! 😉
No dudes que fue un placer. Además, pudimos ver una buena variedad de bichos pequeños, aunque nos faltaron los grandes, je, je. ¡Habrá que ir pensando en repetir!
Una pena lo de Teodoro. Solo coincidí con el en una ruta, por el monte Calar ( montripero.blogspot.com/2016/11/calar-again-151116.html), a cuenta de un amigo común. Hacia unas entradas en su blog muy guapas.
Ya te dije, no dejes de visitar la Cueva del Agua, que vale mucho la pena.
¡Un abrazo Esgallero!