Otra travesía de gran recorrido junto a Jesús. Nos dejó Lourdes en la Venta de Tajahierro, cerca del puerto de Palombera un sábado por la mañana. Desde allí fuimos hasta los Puertos de Sejos, cruzamos el Saja y por los Cantos de la Borrica llegamos hasta Puente Pumar. Un trecho de carretera hasta San Mamés y empezamos a subir las faldas de Peña Sagra. Hicimos noche junto a un viejo chozo circular al píe del Cuernón de Peña Sagra, en la llamada Braña del Tajo.
El domingo por la mañana salimos rumbo a la ermita de Nuestra Señora de La Luz, desde la que nos dirigimos por la pista hasta Luriezo y por carretera hasta Cahecho. Ya en el último tramo, pasamos por la ermita de San Tirso, enclavada en un prado con unas vistas privilegiadas sobre los Picos de Europa. De allí a Potes, donde llegamos sobre las 14:00 y donde nos estaban esperando las señoras para comer unos garbanzos del lugar.
Hace unos años que dejamos de hacerlo, pero cada día estoy más convencido de que hay que retomar estas rutas de un par de días, porque te dejan el cuerpo y el alma como recién planchado.